Lo que el lector puede buscar en lo que sigue es el bosquejo de una teoría de las situaciones vitales como fundamento filosófico de la filosofía. Tal vez, según esto, resulte que el título de la obra es más lato que su contenido. Los análisis psicológicos, en efecto, ocupan en el más o menos extensión, pero no constituyen propiamente su estructura. Sin duda esos análisis no hubieran resultado significativos, en su intención y en su término, si no hubieran ido presedidos de cuanto aquí se expone sobre los conceptos articulares de la teoría: la espacialidad y la temporalidad como datos inmediatos de la experiencia; la acción; la expresión, etc.
Eduardo Nicol